Esta SAS+9 promueve que los proyectos sobre cambio climático (CC) anticipen y eviten posibles impactos adversos en la salud de las personas, y velen por la seguridad de las comunidades afectadas por el proyecto durante todo el ciclo del mismo. Para ello, tiene por objetivos principales:

1. Favorecer la adaptación al CC de los ecosistemas, los pueblos indígenas, afrohondureños y comunidades;
   
2. Incrementar la resiliencia de los pueblos indígenas, afrohondureños, comunidades, la sociedad en general y los ecosistemas a través de la gestión del riesgo de desastres;
   
3. Evaluar, prever y evitar generar o aumentar los riesgos a la seguridad pública como producto de implementar un proyecto de CC.
   
4. Impulsar acciones diferenciadas para abordar los impactos del cambio climático entre hombres y mujeres.
   
5. Impulsar los análisis de vulnerabilidad al cambio climático por género.

Honduras está muy expuesto a eventos naturales adversos y al cambio climático, especialmente a fuertes lluvias y sequías que ocurren regularmente y afectan desproporcionadamente a los pobres. Dada su ubicación geográfica en la parte más ancha del istmo centroamericano, el país se encuentra permanentemente expuesta a eventos meteorológicos extremos que están siendo exacerbados por el cambio climático. “Las características biofísicas y topográficas del país, así como los niveles de

pobreza, le confieren una alta vulnerabilidad ante eventos de esta índole. Por ello, en el estudio para el 2015 del Índice de Riesgo Climático Global de Germanwatch, se identifica a la República de Honduras como el país más afectado a nivel mundial por eventos climáticos extremos en el periodo 1994- 2013. La alta vulnerabilidad del país afecta en gran medida “el potencial de crecimiento de la economía y las oportunidades económicas para los hondureños” (Banco Mundial, 2020).

Si no se evalúan los riesgos cualquier tipo de proyectos, incluidos los climáticos, pueden agravar la situación de vulnerabilidad de comunidades y ecosistemas, por ejemplo al:

• Modificar ecosistemas que actúan como barreas naturales ante inundaciones, vientos, deslizamientos y otros, como bosques, pastizales y manglares;

• Promover un incremento en el uso del agua por introducir otros usos, agravando aún mas la situación de estrés hídrico de una determinada zona;

• Incrementar los incendios forestales por la construcción de caminos, introducción de determinada maquinaria o determinada especie arbórea